Los gauchos, ¿dónde se reúnen para tomar algo?
Pulperías, boliches, almacenes de ramos generales y bares son todos lugares anclados en las tradiciones de Argentina, pero que tienen orígenes y funciones muy distintas.
Al principio, la pulpería ...
La época de las primeras pulperías sigue siendo imprecisa, aunque los historiadores ubican la construcción del primero de estos establecimientos en el siglo XVI. Originalmente, era un local comercial típico de las diferentes regiones hispanoamericanas, desde América Central hasta el Cono Sur, que proporcionaba a los clientes de las clases sociales bajas y medias productos indispensables de la vida cotidiana. Alimentos, bebidas, medicinas, carbón, telas … Allí se hacía negocio, pero no solamente. Los habitantes también tenían la costumbre de reunirse en las pulperías para charlar, tomar una copa mirando peleas de gallos, jugar a los dados o naipes y enterarse de las novedades… Mesas y sillas estaban siempre disponibles para los habitantes, que disfrutaban de este lugar como un verdadero punto de encuentro.
El origen de la palabra pulpería sigue siendo impreciso, hoy nadie puede afirmar con exactitud cuál es la hipótesis correcta. Algunos dicen que deriva de pulpo porque en las primeras pulperías se solía servir este animal, especialmente pulpo a la gallega. Para otros, la razón es obvia: pulpa de fruta era vendida allí. Según otra teoría, la palabra proviene de una bebida mexicana, el pulque, un alcohol elaborado con hojas de maguey.
En Argentina, estos establecimientos fueron una expresión vibrante de la cultura local. En el caso de la región del Río de la Plata, siempre había una o dos guitarras, por lo que los gauchos podían tocar música y cantar. A menudo había bailes y payadas entre los parroquianos. Se estima que para 1810 había más de 500 pulperías en la provincia de Buenos Aires.
En 1820, el naturalista francés Auguste de Saint-Hilaire, describe las pulperías en estos términos: “Es allí donde los indios y los mestizos pasan la mitad de su vida, dejando el poco dinero que ganan”.
Charles Darwin, quien pasó dos meses en la región, escribió en 1832: “Un gran número de gauchos acude allí por la noche a beber licores espirituosos y a fumar. Su apariencia es chocante; son por lo general altos y guapos, pero tienen impreso en su rostro todos los signos de la altivez y del desenfreno… Tanto nos hacen un gracioso saludo como se hallan dispuestos a acuchillarnos si se presenta la ocasión”.
Hoy en día, las pulperías de antaño no se ven más en Argentina. Sin embargo, en algunos pueblos tradicionales como San Antonio de Areco, deseosos de preservar las tradiciones gauchescas, es posible descubrir lugares similares, decorados al estilo de estos antiguos edificios. Este es particularmente el caso de la Pulpería La Blanqueada, construida en el siglo XIX, y que hoy forma parte del Museo gauchesco Ricardo Güiraldes.
... luego el Almacén de Ramos Generales, el boliche y el bar.
A principios del siglo XX, el término pulpería cae en desuso en ciertas partes de América. En Argentina, las pulperías son reemplazadas poco a poco por establecimientos que tienen funciones más precisas: los almacenes de ramos generales y los boliches.
Los almacenes de ramos generales (o despensas) cumplen entonces el papel de tienda de abarrotes vendiendo alimentos en todas sus formas, pero también de ferretería, talabartería, bazar, etc. En algunos casos, incluso hay maquinaria agrícola, materiales de construcción, ropa, armas, muebles, molinos de viento, tranqueras y otros artículos para actividades rurales y domésticas. Casi todos también ofrecen bebidas en el mostrador y algunos complementan sus artículos con anexos de carnicería y panadería.
Los boliches, por su parte, son establecimientos que han heredado la parte de entretenimiento de las pulperías: vamos allí para escuchar música y especialmente bailar. Incluso hoy en día, el término es ampliamente utilizado en Argentina. Sin embargo, el origen de la palabra es antiguo y se remonta a la época colonial. De hecho, en la época de los virreinatos españoles, no era raro ver canchas de bochas al costado de las pulperías. Como se apostaba dinero, el pulpero sabía que los clientes celebrarían sus victorias y gastarían sus ganancias en su casa. En este juego, se comienza lanzando una pequeña bocha que luego se toma como objetivo. El ganador es el que logra lanzar su bocha lo más cerca posible de la pequeña, llamado bochín o boliche. La expresión sudamericana “arrimar el bochín” finalmente se desvió hacia la acción de acercarse a una mujer con intenciones seductoras. ¡La discoteca local había nacido!
Finalmente, mucho más tarde, con el desarrollo de las zonas urbanas, llegaron los bares como los conocemos.
¿Dónde tomar una copa hoy en San Antonio de Areco?
En San Antonio de Areco, algunos bares y restaurantes todavía utilizan las denominaciones de antaño. Aquí está una lista de nuestros mejores lugares para comer y beber :
- - Restaurante El Almacén de Ramos Generales (Zapiola 143)
- - Bar San Martín (Moreno y Alvear)
- - Boliche de Bessonart (Segundo Sombra y Zapiola)
- - El Mitre (Mitre y Alsina)
- - El Tokio (Mitre y Arellano)
- - El Balthazar (Arellano y Mitre)
- - Pulpería Lo de Tito (Matheu 411)
- - La Pulpería de Areco (Bolivar 66)